17.7.07

Para compartir II

Extraido de: http://weblogs.clarin.com/hijosnuestros/
Miércoles 4 de Julio de 2007
5 tipos de madres que no aconsejamos frecuentar (II)
1) La mamá new age. Sus hijos apenas conocen el azúcar (rubia) y jamás probaron siquiera un sorbo de gaseosa. Las primeras veces que les hizo tomar té verde no pudieron disimular las arcadas, pero como ella dice, "si es natural es mejor", así que no les quedó otra que acostumbrarse. Las camas marineras del dormitorio infantil están dispuestas en sentido norte-sur con las cabeceras demasiado cerca del ventanal: gracias al Feng Shui, los chicos corren el riesgo de sufrir un accidente y a ella no le importa. La casa está "armonizada".

2) La mamá mascotera. Se mudó con el viejo cocker que sus padres no pensaban cuidar. Trajo una gata. Después cayó una perra en adopción. Otro gatito abandonado la enterneció y fue a parar al dos ambientes donde vive con un bebé y una nena de 4 años. Todas las mañanas la despierta el canto del canario que retumba en la cocina, si es que el perro no la molestó antes con su incontinencia urinaria o si el hámster no se escapó de la jaula que está detrás de las piedritas de los gatos. Sus hijos viven besando los hocicos mugrientos de los animales porque, claro, se criaron como Tarzán en la selva. A ella le parece de lo más normal y le encanta la mancomunión entre mascotas y niños, porque -aclara- "todos son mis hijos y somos una gran familia".

3) La mamá "grande". Los pocos años que transcurrieron entre el nacimiento de su tardío bebé y los primeros síntomas de la menopausia son vitales a la hora de entender sus complejos. No quiere ir a las reuniones de padres porque sus pares se confunden y creen que es la abuela del pobre chico, también traumado por las "palabras de vieja" que ostenta el léxico de su madre. Es que sobreprotege a su hijo único como una madre de antes y lo malcría como una abuela de siempre.

4) La mamá rocanrolera. Casi un resabio de la tradicional madre hippie, esta especie se destaca por el olor a patchouli de sus atuendos de jean y, principalmente, por la tenacidad con que intenta transmitirle toda su brutalidad a su descendencia. Los gestitos con la mano, los "aguante" como única palabra introductoria en los diálogos, la lengua stone en la campera y el flequillo de rigor son señas que sus chicos incorporan rápidamente, para luego concurrir juntos a recitales donde se disuelven las diferencias de edad. La mamá rocanrolera, eterna adolescente, nunca crecerá...

5) La mamá ocupada. En esta categoría no hay mucho por describir ya que es tan breve el tiempo que comparte con sus hijos, que apenas se la puede denominar madre. Los recuerda en las fotos que decoran la pantalla de su celular o notebook y con eso alcanza, de todo lo demás se encargan "la chica que los cuida", los abuelos, el colegio/prisión bilingüe de doble turno y las actividades extracurriculares como ajedrez, danzas o voley: es que los chicos "ya están grandes y se manejan solos". Provoca la envidia de las amas de casa que la ven desfilar llena de carpetas, agendas y diez mil planes para lo que queda del día, pero se trata de una envidia inútil: ellas no saben cuánto tiene que hacer para que su vida no parezca más vacía.

Publicado por Diego Suarez el Julio 4, 2007 11:23 AM

2 comments:

Alejandra said...

jejeje, a veces una es un poco de cada cosa ¿no?

Anonymous said...

y si! siempre tenemos un poco de cada cosa! y eso esta bueno!